A diferencia de la entrega del Ariel de 2020, que duró tres horas y 20 minutos, la edición 63 de los Ariel apostó por un formato más ágil, con un programa donde anuncian ganadores y un encuentro posterior con algunos de ellos.
La gala arrancó de forma virtual a las 21:00 horas y en apenas 20 minutos habían anunciado nueve ganadores, además del Ariel de Oro para el sonidista Fernando Cámara, quien destacó el buen estado del cine mexicano.
«Es un premio que refleja decisiones que hemos ido tomando a lo largo de nuestra carrera, decisiones chiquitas de dónde ponemos un micrófono, qué micrófono ponemos, cómo vamos a mejorar la escena. También decisiones personales, no comprarle a mi esposa una bicicleta porque tenía que comprar un micrófono o a mis hijos una pelota porque el micrófono que compré necesitaba un paravientos.
«Hubo sacrificios y decisiones políticas difíciles cuando tuvimos que pelear fondos públicos y apoyar a nuestra industria. Se resolvió muy bien el tema de la producción de cine en México, se produce una gran cantidad de cine y de gran calidad», dijo Cámara al recibir su galardón.
La película con más nominaciones de esta edición es Sin Señas Particulares, de Fernanda Valadez, que compite en 16 categorías, incluida Mejor Película.
En los primeros tres bloques de anuncios de ganadores, el largometraje se llevó el premio a Guion Original, Fotografía, Edición y Efectos Visuales, con lo que encabeza la gala.