El León terminó la etapa más física de su pretemporada, no así la intensidad que quiere mantener de cara a su primer partido de preparación, este fin de semana, ante Murciélagos de Los Mochis.

Los Esmeraldas cumplieron ya su primera semana de trabajo en la ciudad, tras más de 11 días en Pachuca, Hidalgo, lo que los dejó a punto para lo que realizan ahora, ya con más trabajos de futbol.

«Me estoy exigiendo porque tenía alrededor de casi dos años que no hacía una pretemporada exigente y hoy me siento en plenas condiciones, fuerte mental y anímicamente, y físicamente estoy recuperando ese nivel que quiero», dijo el volante Alex Mejía, que ejemplifica el trabajo de hecho.

Mejía será la base de un esquema que Javier Torrente trabaja, un novedoso 4-3-3 que pretende darle mucha ofensividad a su cuadro, con una alta presión que ya han adelantado sus jugadores.

Para eso es importante el trabajo de los refuerzos recién llegados en el medio terreno, que tendrán su primera prueba este sábado, contra el equipo de la división de Ascenso.

Los Panzas Verdes trabajaron ayer en el Estadio León con dolencias de sus medios Leonel López, que presenta una contractura esta semana, y el defensor Miguel Herrera Equihua, quien continúa con molestias en el pie.