Cada rincón de Guanajuato Capital es magia en esplendor puro. Caminar por sus calles hará llevarte una grata sorpresa.

Sus hermosos edificios, calles y callejones, plazas y mucho más, le han valido el nombramiento de Ciudad Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1988.

Los sitios imperdibles que debes visitar cuando viajes a la capital del estado son varios.

El Mercado Hidalgo no se trata de un mercado común, es una construcción que originalmente sería una estación de tren. Fue inaugurado en 1910, y se ha convertido en un sitio lleno de sabores donde turistas y locales pueden encontrar una vasta oferta de alimentos, artesanías, antojitos y mucho más.

En la Presa de la Olla si lo que buscas es un poco de paz, es el sitio ideal. Emblemático lugar familiar, rodeado de naturaleza, donde podrás remar, disfrutar del paisaje y comer exquisitos antojitos.

El Callejón del Potrero es uno de tantos de los que está lleno Guanajuato. Este está localizado cerca del Museo Iconográfico del Quijote.

La Calle Alonso es una de las más famosas por su vida nocturna y la celebración de “La ruta del corazón”.

En la Universidad de Guanajuato tienes que admirar su majestuosidad arquitectónica.

La Subterránea es algo que hace única esta ciudad. Sus 8 kilómetros de calles subterráneas la convierte en la más larga del mundo.

Las Minas hicieron de Guanajuato una ciudad especial. No te puedes ir sin recorrer La Valenciana, Mina de Rayas, o la Mina del Nopal.

El Mirador del Pípila es parada obligada. Cuando hayas recorrido los callejones de la ciudad. ¿Qué te parece admirarlos desde las alturas?

Los Museos y Galerías de Arte desbordan cultura por todos lados, y en la capital puedes conocer numerosos sitios para aprender sobre la Independencia, Diego Rivera, arte moderno, antropología, historia y hasta momias.

El Teatro Juárez es una de las construcciones más emblemáticas de la ciudad y considerada como uno de los teatros más bellos del mundo.

Ven a Guanajuato Capital y sorpréndete de la historia y cultura que se vive en cada rincón, y  así Vivas Grandes Historias.